Mujer de Azul -Museo Reina Sofia

El cuadro "Mujer de azul" se realizó en la ciudad de Madrid en 1901 después de que Picasso regresara de su viaje a París, donde tuvo la oportunidad de conocer la pintura postimpresionista.

La obra muestra en primer plano a una mujer sentada y envuelta en un corsé oscuro; la protagonista muestra una actitud austera y fría que contrasta con una brillante elegancia: el suntuoso vestido, el peinado de cabello exageradamente hinchado, la amplia falda ricamente decorada que la envuelve, las lujosas joyas, mientras el rostro, clara e iluminada, está marcada por la considerable cantidad de maquillaje. La mano izquierda parece descansar rígidamente sobre el respaldo de la silla, mientras que la mano derecha se coloca suavemente sobre el regazo. El color azul se mezcla con las tonalidades cromáticas de verde, blanco y negro creando una figuración cínica y distante.

Con la inquietante imagen del cuadro Pablo Picasso parece haber querido enfatizar la hipocresía y el conformismo de la clase social burguesa.